Solo en Florida hay casi 400 tiendas Walmart. Es, después de Texas, el estado más “invadido” por la marca. Podéis ver en esta página web el mapa con el número de establecimientos por estado.

Aquí os dejo también el blog Walmart Shootings que menciono en el podcast, un blog personal de alguien que decidió documentar la cantidad de tiroteos que se sucedieron dentro de tiendas Walmart durante varios años. Veréis que hay datos hasta principios del 2015. Y no es que pararan los tiroteos en el 2015 -ojalá-, es que la persona que llevaba el blog se cansó de publicar, que no es lo mismo…

A modo de curiosidad, os cuento que hace un par de años, una foto de Walmart se volvió viral debido a que un tweet mostraba cómo en su establecimiento de Evansville, Indiana, habían puesto un cartel de la vuelta al cole que decía “Hazte con el año escolar como un héroe” justo encima de la venta de armas. Se armó una buena. Imaginad: en un país donde, desde el tiroteo del instituto de Columbine, en 1999, ha sufrido más de 230 tiroteos en centros escolares, poner ese cartel ahí era, cuanto menos, una broma de muy, muy mal gusto.

¿La respuesta de Walmart? Pidió perdón, quitó el cartel y aquí no ha pasado nada. Dijeron que había sido un error de comunicación interna y ya está.

Habría sido fantástico que Walmart hubiera tenido el detalle de enmendar esta acción, destinando los beneficios de su venta de armas de ese mes, por ejemplo, a una fundación a favor de la seguridad en los colegios de Estados Unidos. O, puestos a pedir, que hubiese dejado de vender armas en ese mismo momento, y no se hubiese esperado a que un supremacista blanco entrara al Walmart de El Paso (Texas) dos años más tarde con el único propósito de matar a cuantos más hispanos, mejor, para limitar sus ventas.

Pero, si Walmart hiciera este tipo de cosas, este post no existiría. Ni el podcast. O, de existir, seguramente serían muy diferentes. Porque, de ser Walmart una compañía mínimamente humana que se preocupara por algo más que por aumentar sus beneficios a toda costa, no sería lo que es ahora: el número uno de mi lista de Empresas de Mierda.